Pasaron siglos antes de que los artistas encontraran pigmentos de cierta estabilidad, que no viraran a otros tonos. Pero había más problemas. Durante mucho tiempo, no se conocían otros verdes que no fueran la mezcla de azul y amarillo.Algunos colores-como el naranja, hecho con un compuesto de arsénico - eran terriblemente venenosos. El azul era increíblemente caro, hecho con lapislázuli iraní, o espantosamente pálido, como el índigo del Caribe. El amarillo se desteñía enseguida y el violeta era imposiblemente caro. Vasari nos dice que a partir de 1250, es decir, en la época de Cimabue, los pintores ligaban el pigmento con yema de huevo. Recién en 1620 el holandés Hubert van Eyck descubrio que saba buenso resultados diluir el pigmento en aceite. Las gallinas, felices : todo el mundo dejó de usar huevos para pintar . Aunque trataron de mantener en secreto la receta holandesa, los holandeses estuvieron rodeados de espías italianos: Justo de Gante y Antonello de Messina fueron espiados por Doménico Veneziano, a quien Andrea del Castagno le robó la técnica , que pasó a los demás florentinos. Giovanni Bellini quiso conocer el secreto del éxito de la pintura de Messina , y no tuvo otra manera de hacerlo que hacerse pasar por un coqueto senador que pedía ser retratado por Messina. Así que mientras posó para el retrato, observó todo el procedimiento atentamente y robó arteramente la técnica de la pintura al aceite, que hoy conocemos como pintura al óleo.
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